MEJORA DE LA SALUD
NUTRICIÓN
MEJORA DE LA SALUD
Habrás escuchado mil veces que, llevando una alimentación variada y equilibrada, se consigue tener una buena salud y se previenen enfermedades.
Sin embargo, tú intentas comer verdura y fruta todas las semanas, sueles evitar los fritos y la bollería, y aun así, cada dos por tres…
Te falta energía en el trabajo.
Puede ser que te sobre algún kilito o tengas colesterol alto.
Te cuesta conciliar el sueño por las noches o duermes mal.
En ocasiones te pegas atracones de comida por culpa de ansiedad o estrés.
Tienes problemas a la hora de hacer la digestión.
¿Realmente estás seguro/a de que estás comiendo de manera saludable?
Todos los alimentos son sanos de por sí y no habría, en principio, ninguno prohibido. Eso sí, si te sientes identificado/a con algunos de los síntomas arriba descritos, seguramente sea porque no estés haciendo una buena combinación de macronutrientes y no estés obteniendo los micronutrientes adecuados. Los macronutrientes son aquellos nutrientes que suministran la mayor parte de la energía al cuerpo, ¿cuáles son? Los hidratos de carbono, las grasas y las proteínas. Estos hay que compensarlos a lo largo del día y encajarlos dentro de las calorías diarias que cada persona tenga.
Cuando insistimos en hacer una dieta compensada y equilibrada no se trata de simplemente “variar” de alimento: no vale desayunar pan con tumaca, al mediodía una paella y cenar una ensalada. Tampoco sería una buena opción desayunar unas tostadas, comerse un cocido al mediodía y cenar unas judías verdes. ¿Por qué? Pensarás que el pan tumaca, la paella, el cocido, una ensalada o las judías verdes son alimentos “sanos y mediterráneos” y, por tanto, lo has hecho bien. NO. A lo largo del día es recomendable incluir los tres macronutrientes: hidratos, proteínas y grasas.
¿Por qué? Porque los tres son fundamentales para el organismo:
Las proteínas, las grandes olvidadas, se encuentran en las carnes, los huevos, el pescado, la leche, etc, y son esenciales para el crecimiento, mantenimiento y regeneración de nuestras células y tejidos. Es decir, sí o sí hay que tomarlas en cada comida.
Las grasas, imprescindibles para nuestras hormonas y absorber vitaminas (entre otras funciones), por eso debemos meter grasas saludables en nuestra dieta como el aceite de oliva virgen extra o los frutos secos en (pero ojo, no vale con un puñado al azar, todo en su justa medida).
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¿Quieres mejorar tu salud pero no sabes cómo combinar los tres macronutrientes?
No te preocupes, eso es justamente lo que hacemos en nuestras asesorías: calcular exactamente las cantidades de macros que cada persona debe consumir y combinar los diferentes alimentos para que les saques el máximo provecho.
¿Te sientes identificado con alguno de estos problemas?:
Mujeres con dolores muy fuertes durante la menstruación y con un exceso de sangrado.
Puede ser por varias razones, ¿sabías que te podría estar ocurriendo esto porque estás comiendo menos de lo que deberías? Por otra parte, también te realizaremos un estudio para saber si existe una deficiencia de hierro, analizar si el dolor de ovarios se debe a falta de ácidos grasos, o si incluso procede del estrés. ¡Ten por seguro que lograremos reducir tus molestias!
¿Problemas de sueño?
Si tardas mucho en dormirte, das mil vueltas en la cama o en mitad de la noche te despiertas, la cena que estás tomando te puede dar muchas pistas. ¿Sabías que el triptófano es el aminoácido que te ayuda a dormir bien y mejora el estado de ánimo? Por la noche es importante meter alimentos que contengan este nutriente esencial. No lo dudes, ponte en contacto con nosotros si quieres que tus cenas se conviertan en la antesala de un sueño placentero y reparador. ¡Cenarás platos deliciosos y te levantarás por las mañanas con las pilas cargadas!
¿Te resfrías con mucha frecuencia?
Si cada otoño e invierno tiendes a resfriarte o cogerte la gripe, deberías revisar tu cesta de la compra. Nosotros te podemos ayudar a reforzar tu sistema inmunológico incluyendo en tu dieta alimentos ricos en vitaminas A, B, C y, como siempre, con el mínimo de proteínas recomendado. Te aseguramos que podrás reducir los síntomas y la duración de estos cuadros e, incluso, prevenirlos.
¿Comes sano y aún así no adelgazas?
Comer platos saludables no tiene por qué derivar en una pérdida de grasa. La clave está en calcular los macronutrientes que tú, por llevar el estilo de vida que llevas, debes consumir. Todo lo que entra por tu boca cuenta en el recuento de calorías, así como la densidad nutricional (es decir, la cantidad de nutrientes que ingieres en cada comida), así como la densidad calórica (la energía que aportan estos alimentos). Nosotros te lo ponemos fácil, calcularemos todo para que la dieta se adapte a tus gustos y puedas por fin adelgazar, de una forma sana y sin dejar de saborear tus alimentos favoritos.